Me voy pa´l norte

Nos llamaron desde la nortina ciudad de Antofagasta para solicitar un presupuesto de domo invernadero.

Los requisitos fueron varios, por ejemplo, cómo conseguir los materiales. Para quienes no lo saben, Antofagasta es una ciudad del norte de Chile un tanto alejada. Con el desierto más árido del mundo en su patio trasero y lejanía de varios miles de kilómetros respecto de la capital del país, Santiago. Por lo que la logística para este proyecto fue de suma importancia. En esta ciudad las exigencia normales son altas dado el trabajo de ingeniería y minería constante que se lleva a cabo en la zona, en esta región se encuentra una de las mina de cobre a cielo abierto más grande del mundo. Por ejemplo, copio un extracto de algunos de los requisitos respecto a seguridad que tuvimos que cumplir: “A considerar por nuestra área de prevención de riesgos:

• Examen de altura física
• EPP y herramientas certificadas (EPP: Equipo de protección personal)
• Análisis de riesgo ..de las tareas a realizar … 
• Respetar norma Chilena de trabajo en altura
• Cierre perimetral..temporal….”

Con todo, el proceso se dió de forma muy fluida con ayuda de la representante de la Universidad que hizo que tan sólo luego de algunas reuniones más para afinar los detalles, muy pronto tuviéramos el resultado:

2 miembros de nuestro equipo volaron 1350 kilómetros a Antofagasta y construyeron el domo. Todo de acuerdo a las especificaciones requeridas en una intensa semana de actividad.

Cuando finalizamos, regresamos satisfechos, les compartimos unas fotos que nos enviaron. La organización que se formó a propósito de este domo, es Domo Orgánico UCN y actualmente (2019) aún están en pleno desarrollo de sus actividades.

Construyendo frente al mar

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https://www.facebook.com/Domoorganicoucn/

Flores comestibles

Uno de nuestros primeros proyectos domo. Sirvió para colaborar con una pareja de emprendedores, porque requerían de un espacio de laboratorio para germinar sus semillas.

La temperatura más estable que se logra en una cúpula, ya era conocida por nuestros clientes, razón por la cual no titubearon a la hora de solicitar asesoría para la ejecución de su proyecto.

Como resultado de su esfuerzo, hoy ellos comercializan sus flores comestibles en los mejores restaurantes gourmet de Chile. Continúan además utilizando el domo, para atención de público y su labor con las semillas y brotes. Al parecer, con estos resultados, lo seguirán usando por un buen tiempo más.

El proyecto domo